SWL.

SWL.

Ramón Bilbao refuerza sus oferta de blancos con la compra de Godeval en Valdeorras

El mundo del vino mira hacia el blanco. Ramón Bilbao, la división vinícola del grupo Zamora Company, formalizó esta semana la compra de Godeval, una de las bodegas clave en la recuperación de la godello y en la consolidación de Valdeorras como región de referencia en la producción de vinos blancos en España. El grupo no ha hecho público el importe de la operación. 

Entre los accionistas que mantienen una participación minoritaria en la sociedad gallega están los fundadores Honorato López Isla, empresario originario de Santa Cruz (O Bolo) con una larga trayectoria en los sectores eléctrico y de telecomunicaciones y artífice de la transformación de Godeval en una SL en 2016, y José Luis Bartolomé, junto con Araceli Fernández, hija del también fundador Horacio Fernández Presa, fallecido en 2013, y directora de la bodega desde 2006.

La compra refuerza la estrategia del grupo de de ampliar su oferta de blancos sumando un godello a los albariños Mar de Frades en Rías Baixas y a los verdejos de Rueda comercializados bajo la marca Ramón Bilbao. “Hace tiempo que entendíamos que debíamos tener blancos en el porfolio y que no era opcional hacer solo tinto en Rioja y Ribera del Duero”, apunta el directo de Ramón Bilbao, Rodolfo Bastida.

Corazón blanco

Con presencia en Rías Baixas desde 2003 y en Rueda desde 2010, los vinos blancos representan aproximadamente el 20% de la producción total del grupo Ramón Bilbao, tanto en volumen como en valor. Godeval supondrá entre un 4% y un 5% del volumen total de blanco.

“El futuro es blanco en cierta medida”, dice Bastida. “Las previsiones que manejamos a largo plazo indican que el tinto va a perder terreno, pero no tanto. No esperamos un cambio radical del tinto al blanco, si bien es cierto que la tendencia se ha producido más rápido de lo que esperábamos en algunos mercados como el latinoamericano”. 

Godeval también es una apuesta por la gama alta dado el buen posicionamiento de precio de los blancos de Valdeorras. Para Bastida, además, era muy importante contar con viñedo propio y Godeval, entre parcelas propias y arrendadas, se acerca casi a las 50 hectáreas. “En Mar de Frades vamos a superar ya las 100 hectáreas propias y estamos muy contentos con las plantaciones. Cada vez es más difícil convencer a los viticultores para que sigan las indicaciones de cultivo de la bodega. Hoy, lo rico lo tienes que hacer en tus viñas”.

Desde 2015, Bastida ha realizado visitas regulares a regiones vinícolas gallegas junto a la directora de innovación del grupo, Rosana Lisa, y a la directora técnica de Mar de Frades, Paula Fandiño. “Valdeorras nos ha parecido el lugar más interesante, tanto por la variedad como por la singularidad de los viñedos y los suelos. En nuestras catas a ciegas, los vinos de la zona salían siempre muy bien. Nos acercamos a Godeval a principios de año y las conversaciones culminaron el martes pasado con la firma de la compra en Madrid”, explica el máximo responsable de Ramón Bilbao.

Godeval está considerada la cuna de la godello y Horacio Fernández Presa, uno de sus fundadores, su gran rescatador. En los años setenta, cuando ejercía de jefe de la Agencia de Extensión Agraria de O Barco, impulsó el Plan Revival (Reestructuración de Viñedos de Valdeorras) para la recuperación de esta variedad que, en el aquel momento, era totalmente minoritaria en Valdeorras. Junto con José Luis Bartolomé, técnico de Extensión Agraria y otros socios, realizaron la primera vinificación de Viña Godeval (el nombre es un acrónimo de godello de Valdeorras) en la cosecha 1986. La hija de Bartolomé, Ana, está al frente de la dirección técnica desde 2022. Ramón Bilbao apuesta por la continuidad del equipo actual. El grupo también mantendrá la godello de Mar de Frades, un vino de producción limitada con un perfil muy salino .  

Ramón Bilbao, por otro lado, no es el primer gran grupo español en llegar a Valdeorras. La bodega de Ribera del Duero Pago de los Capellanes produjo su primer godello en la zona en la cosecha 2014 bajo la marca O Luar do Sil y la riojana Cvne adquirió la bodega de O Barco Virgen del Galir en 2018. Entre los productores de fuera que han contribuido de manera importante a cimentar el prestigio de la región, hay que destacar la figura de Rafael Palacios, cuyo As Sortes se ganó muy rápido el favor de la crítica internacional; así como a Telmo Rodríguez y Pablo Eguzkiza, descubridores del potencial tinto del valle del Bibei desde su bodega Ladeiras do Xil. Jorge Ordóñez, con proyecto propio en la zona desde 2009 (Bodegas Avancia), puso el primer godello en el mercado norteamericano a principios de los noventa cuando era importador de Godeval. 


Firma

Amaya Cervera

Periodista especializada en vino con más de 25 años de experiencia. Fundadora de Spanish Wine Lover y Premio Nacional de Gastronomía a la Comunicación Gastronómica 2023