Bodega Telmo Rodríguez | Spanish Wine Lover

Pasión por el vino español

BODEGAS

Propiedad de los elaboradores y amigos Pablo Eguzkiza y Telmo Rodríguez, la Cía. comienza a mediados de los noventa produciendo vinos de buena relación calidad-precio con la premisa de trabajar con variedades autóctonas en zonas originales (garnacha en Navarra, verdejo en Rueda o monastrell en Alicante), pero sus logros más notorios vienen de la recuperación de viñedos olvidados, en especial con sus moscateles de la Axarquía malagueña, las garnachas de Cebreros (como un primer y solitario precursor del actual y vibrante movimiento de Gredos) y más recientemente godellos y mencías de Valdeorras en las inmediaciones del municipio de Santa Cruz y muy cerca de la línea divisoria con la Ribeira Sacra.

La Cía., que se ha asegurado muy bien su subsistencia con vinos de buena relación calidad precio como Basa (Rueda), se ha apoyado siempre en viticultores locales para profundizar en el estudio de cada zona y en sus vinos históricos. Cuando se trabaja con viñedos singulares, la filosofía es siempre reflejar la personalidad del terruño y del paisaje por encima incluso de la variedad. También es habitual intentar diluir el peso de la elaboración combinando recipientes de distintos materiales.

En la bodega de Rioja, por ejemplo, situada en Lanciego, se vinifica todo en cemento; en Rueda se combina acero inoxidable con madera y huevos de hormigón, mientras que en Cebreros entran en escena las tinajas de barro.

El viñedo de Las Beatas en Rioja merece una mención especial. Es un pequeño pago de menos de dos hectáreas situado en Labastida que se ha recuperado intentando reproducir el modelo de Rioja anterior a la plantación de las primeras grandes fincas a finales del XIX, con su mezcla de variedades y técnicas de cultivo ancestrales. Se elabora en una de las bodegas más antiguas de Ollauri que se ha querido mantener lo más intacta posible. La producción es muy reducida y el vino alcanza unos 130 € en España.

“Hay que ser consciente intelectualmente de que tienes algo que merece la pena guardar”, dice Pablo Eguzkiza, un personaje inconformista que no tiene pereza de cuestionarse o replantearse numerosos temas relacionados con el vino. Pero puestos a resumir, considera que las dos grandes cuestiones de su trabajo son cuándo vendimiar y cuándo sacar el vino de barrica.

La gama de la Cía. es tremendamente extensa. En casi todas las zonas se elaboran vinos básicos o de entrada de gama. El monastrell Al Muvedre (unos 5,5 € en España, algo menos de 100.000 botellas) de Alicante es el más asequible; les siguen el cigales tinto Viña 105 (7,5 €, unas 25.000 botellas), que es un coupage de tempranillo y garnacha; Basa (7 €, casi 600.000 botellas) de Rueda, un verdejo con un pequeño porcentaje de viura fermentado en acer inoxidable; Gazur (unos 9 €, menos de 20.000 botellas) en Ribera del Duero; Dehesa Gago (unos 8 €, por encima de las 100.000 botellas) en Toro y los Gaba do Xil de Valdeorras en versión blanca (godello, en torno a 10 €, 80.000 botellas) y tinta (mencía, unos 8 €, 40.000 botellas). En Rioja están el tinto joven LZ (unos 7 €, algo más de 80.000 botellas) y Corriente (unos 9 €) con 12 meses de barrica.

Las gamas altas intentan reflejar lo más característico del terruño y los viñedos singulares de cada zona. En Rueda, El Transistor (alrededor de 8.000 botellas, 17 €) se elabora con viñedos de verdejo en vaso. En Toro, Pago La Jara (45 €, menos de 4.000 botellas) se elabora con parcelas de tinta de toro en este mítico paraje con característicos suelos arenosos. En Ribera, Matallana (unos 80 €, menos de 5.000 botellas) intenta reflejar la diversidad de suelos de la denominación. Se elabora con viñedos propios repartidos en los municipios de Sotillo, Roa, Fuentecen, Fuentemolinos, Pardilla y Fuentelisendo, con fermentación en tino de madera.

En Cebreros (Gredos, Ávila), tierra de garnacha, la mayoría de viñedos están situados en la zona del Alto de Arrebatacapas, pero se diferencian los vinos en función de los suelos: Pegaso Pizarra (unos 28 €, algo más de 10.000 botellas) y Pegaso Granito (28 €, menos de 5.000 botellas).

La gama alta de Valdeorras es relativamente reciente pero particularmente impactante, tanto los viñedos en bancales de vértigo en los que se ha preservado al máximo el paisaje y la mezcla tradicional de variedades, como los vinos, en especial los tintos. As Caborcas (unos 40 €) y O Diviso (unos 50 €), procedentes de viñedos situados en laderas orientadas al norte (O Diviso con vistas al espectacular santuario de As Ermitas) tienen un perfil más fresco y aéreo frente a la arrebatadora profundidad de Falcoeira A Capella (50 €). Este último ocupa una ladera particularmente inclinada con orientación sur que está considerada como el grand cru de la zona. El viñedo estaba completamente abandonado, por lo que hubo que roturar el monte, reconstruir las terrazas y plantar desde cero; un proceso que ha durado casi 15 años. El Branco de Santa Cruz (20 €) es un coupage de godello, treixadura, doña blanca y palomino que se elabora con las cepas blancas intercaladas en estos tres viñedos.

En Rioja, el gran centro de operaciones de la Cía, los vinos se surten de uvas del municipio de Lanciego. Los más altos de gama proceden de las características zonas de replanos del municipio. Lanzaga (20 €, unas 45.000 botellas, fermentado en cemento y criado en fudre y barricas) proviene de 12 hectáreas propias en biodinámica y 8 más de proveedores, todo viñedos en vaso con un coupage de tempranillo, graciano y garnacha. Las mismas variedades estaban presentes en Alto de Lanzaga (unos 68 €, en torno a las 5.000 botellas), un compendio de siete parcelas propias trabajadas en biodinámica que se dejó de elaborar (2013 fue su última añada) para embotellas algunos de estos viñedos por separado. Con la cosecha 2014 se han estrenado en el mercado La Estrada (0,64 has., mayoría de tempranillo con garnacha, 1.200 botellas, 72 €), El Velado (ubicado en Viñaspre, con mayoría de garnacha, 0,93 has. unas 500 botellas, 70 €) y Tabuérniga (4,4 has. en Labastida, unas 1.900 botellas, 60 €).

Málaga es la única región en la que se elaboran vinos dulces y, de hecho, el proyecto nace encaminado a recuperar la tradición de los moscateles de la abrupta y montañosa región de la Axarquía, pero en clave de vinos naturalmente dulces (con todo el alcohol y el azúcar procedentes de la propia uva) elaborados a partir de uvas asoleadas. MR (unos 15 €, 20.000 botellas) es el vino de entrada de gama seguido de Molino Real (unos 40 €, menos de 10.000 botellas) que procede de viñedos en propiedad en el entorno del municipio de Cómpeta. Existe un Old Mountain (unos 130 €) de larguísimo envejecimiento en barrica (casi ocho años) del que se elaboran unos pocos cientos de botellas. Más recientemente se ha incorporado a la gama el blanco seco y joven Mountain (unos 13 €).

VINOS CATADOS DE ESTA BODEGA

Las Beatas 2012 Tinto
As Caborcas 2012 Tinto
Branco Santa Cruz 2012 Blanco
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