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Cabezaparda 2023 Tinto

Viña Salceda, la bodega de Rioja Alavesa adquirida por Grupo Perelada junto al resto de activos vinícolas de la familia Chivite, está inmersa en una nueva etapa bajo la dirección enológica de David González.

González ya lideró una transformación importante en Rioja cuando estuvo al frente de Gómez Cruzado. En esta bodega centenaria del Barrio de la Estación de Haro apostó por ensamblajes rompedores en su momento, como un 50% tempranillo, 50% garnacha, y por una exploración de terruños, con especial atención por la Sonsierra y el valle del Najerilla, convirtiendo la garnacha de esta última zona en ingrediente fundamental de varios vinos de la bodega.

Ahora asume el reto de poner al día una firma fundada en 1969 que apostaba por los indicativos de envejecimiento tradicionales en sus Viña Salceda Crianza, Reserva y Gran Reserva, y del reserva de alta gama Conde de la Salceda. Además de incorporar un blanco sobre lías, el grueso de su trabajo se ha centrado en desarrollar una gama de parajes que muestre terruños específicos de Rioja.

Sin dejar de mirar hacia las zonas que mejor conoce, González ha buscado expresiones bastante diferentes a las que nos tenía acostumbrados en Gómez Cruzado. El mejor ejemplo es Cabezaparda, una garnacha que se nutre de viñas viejas del triángulo formado por Badarán, Cordovín y Cárdenas, en el valle del Alto Najerilla. El nombre alude al pico de más de 2.000 metros que se alza dentro de la Reserva Regional de Caza de la Sierra de la Demanda, la cordillera montañosa que demarca la DOCa Rioja en su parte meridional. 

Se trabaja con aproximadamente un 30% de raspón, pero tras los descartes en el ensamblaje final, su presencia no supera el 10%. La crianza, de un año de duración, se reparte entre huevo de hormigón, barricas de 225 litros sin tostar y un fudre de 2.500 litros, repitiendo un patrón cada vez más habitual en vinos de gama alta de Rioja que buscan una buena definición del terruño y limitar al máximo el aporte del roble.

Para quienes conozcan Pancrudo, la icónica garnacha de Gómez Cruzado, marcada por su fruta crujiente, tonos herbales y estructura aérea, Cabezaparda propone un paladar algo más estructurado. La nariz es fiel al carácter sexy y cautivador de la variedad, que se expresa aquí en clave mediterránea, con notas especiadas (pimienta blanca), de piel de naranja y flores secas (pétalos) sobre un fondo terroso. En boca es jugosa, pero también hay una sensación rotunda y terrosa, como si remitiera más a los suelos rojos arcillosos que caracterizan la zona.

Una buena opción para garnachistas que busquen un tinto capaz de acompañar platos de consistencia media estas Navidades. La expresividad de la variedad está garantizada. 

14% vol.
4.000 botellas
38 €
Puntuación: 93


Firma

Amaya Cervera

Periodista especializada en vino con más de 25 años de experiencia. Fundadora de Spanish Wine Lover y Premio Nacional de Gastronomía a la Comunicación Gastronómica 2023