Con solo 16 años y la elaboración de sus primeras 1.000 botellas de cava, Josep Mitjans arrancó en 1985 este proyecto que marcaba un giro de 180 grados desde el granel que se elaboraba en la finca familiar del Penedès hacia los vinos de calidad embotellados.
Josep y su mujer Teresa Nin, hermana de la conocida productora de Priorat Ester Nin, han unido sus respectivas herencias vitícolas y en la actualidad cultivan las 20 hectáreas que rodean la vieja masía de Vilobí del Penedès donde se sitúa la bodega y que son el legado de la abuela de Josep, y 20 más en uno de los municipios más altos de la DO, El Plà de Manlleu, que vienen de la familia de Teresa. Si los suelos en la parte baja de Vilobí son de naturaleza más calcárea, en el Plà de Manlleu la proporción de arcilla es más elevada. A principios de los 2000 abrazaron el cultivo orgánico y poco después evolucionaron hacia la biodinámica. De hecho, forman parte de Terra Dinámica, un grupo de viticultores locales que se reúnen cada tres meses para realizar de forma conjunta sus preparados biodinámicos.
El proyecto se bautizó Loxarel en honor a la xarel.lo, la variedad local que cubre más de la mitad de los viñedos de Vilobí del Penedès. La bodega produce actualmente unas 320.000 botellas, la mitad de espumoso y la otra mitad de vinos tranquilos repartidas en 24 vinos diferentes.
Hace tres años abandonaron la DO Cava y se integraron en Classic Penedès, la nueva designación para vinos espumosos creada dentro de la DO Penedès. El motivo: no les permitían comercializar un espumoso de larga crianza sin degollar. Esta es la idea del 109 Reserva Brut Nature (unos 68 € en España), un espumoso que envejece durante 109 meses en un antiguo refugio antiaéreo construido durante la Guerra Civil y que se comercializa con su corcho y grapa original, tal y como si se cogiera directamente de la cava.
La gama de espumosos elaborados por el método tradicional de segunda fermentación en botella que arranca con un par de Bruts Nature elaborados con el trío de uvas autóctonas xarel.lo, macabeo y parellada, incluye un raro monovarietal de garnacha blanca (unos 10 € en España), un coupage de xarel.lo y chardonnay bautizado como Refugi (13 €) o el Reserva Familiar (42 €) que, con una presentación clásica y tradicional, envejece entre 42 y 48 meses. El espumoso rosado 999 (9 €) y el refinado y vibrante blanc de noirs MM (18 €) se elaboran a partir de una mezcla de pinot noir y xarel.lo vermell (una mutación de xarel.lo de grano rojizo y maduración más tardía).
Tras descubrir las ánforas en una feria italiana, Josep fue pionero en su uso en Cataluña y en la actualidad cuenta con una gama específica de vinos que fermentan y se crían en ellas. Josep dice que permiten que el vino respire, respetan la fruta y hacen un efecto botijo que aporta gran frescura. Con capacidad de entre 720 a 1.000 litros, las ánforas que utiliza están revestidas de cera de abeja o pez para evitar rápidas oxidaciones y las ha fabricado un artesano extremeño con tradición en el barro desde el siglo XVIII.
El Xarel.lo Ámfora (12 €), con cuerpo y carácter de frutos secos, es una perfecta introducción a la categoría. A Pèl (12 €) es otro xarel.lo, pero mucho más salvaje ya que fermenta con pieles y no tiene sulfitos añadidos, lo mismo que su versión tinta (12 €) que mezcla garnacha y merlot y cría parte del vino en barricas de 500 litros. Ahora sale al mercado un tercer A Pèl método ancestral que empieza la fermentación con pieles en ánfora y la termina en botella para conseguir burbujas de forma natural. Cierra la serie de vinos de ánfora el tinto Ops (11 €), una mezcla de garnacha y cariñena que sí lleva adición de sulfuroso.
Otros vinos interesantes son los monovarietales de garnacha blanca (9 €) y xarel.lo vermell. Estos últimos se embotellan bajo la marca LXV en versión blanca (12 €) y rosada (12 €). La bodega también trabaja con variedades tintas internacionales que embotella por separado como syrah (Eos, 11 €) cabernet sauvignon (Loxarel 790, 11 €) o pinot noir (Mas Cargols, 15 €).