Las ventas online todavía representan un porcentaje muy pequeño de las ventas globales de vino en el mundo, menos del 5% según las cifras presentadas en Vinexpo el año pasado y menos del 2% en un mercado tan importante como Estados Unidos (datos de Wine.com). Sin embargo, el número de operadores ha crecido significativamente en los últimos tiempos y la oferta se ha multiplicado. Los consumidores ganan porque pueden acceder a todo tipo de etiquetas entre las que se incluyen botellas de producción limitada de pequeños productores, a menudo elaboradas con originales variedades de uvas o procedentes de paisajes y terruños de gran personalidad.
Las principales plataformas españolas de venta de vino online ya hace tiempo que ofrecen sus referencias a consumidores europeos, fundamentalmente a países de la UE, a menudo a través de páginas creadas ad-hoc para países concretos en su propio idioma. “Nuestro principal mercado ahora mismo es Alemania” explica Josep Pizán, director de marketing de Decántalo. Y Toni Vicens, fundador de Vinissimus dice que tienen muy buena presencia en Francia y Alemania, aunque el mercado británico es el que crece más rápido. Uvinum, por su parte, desde su condición de market place que rebota todos los productos de sus afiliados presume de tener el mayor catálogo de vinos, destilados, cervezas y productos gourmet a la venta en Europa con más de 50.000 referencias.
Son los principales actores de la venta online en España, pero cada vez hay más webs ofreciendo vino español fuera de nuestras fronteras a precios de aquí que resultan especialmente atractivos a los consumidores europeos. En la mayoría de los casos los envíos se realizan directamente desde España de modo que la logística es importante, pero la estructura de costes se reduce considerablemente al no tener que contar con un almacén en los países de destino.
Nos cuenta uno de sus fundadores, Nico Bur, que en la actualidad el 80% de las ventas de vino de la plataforma se realizan fuera de España con Reino Unido, Francia, Italia y Alemania como mercados más fuertes. Como market place que es, Uvinum ofrece los productos de unas 130 tiendas diferentes de toda Europa, entre las que se encuentran las españolas Vins i Licors Grau, Bodegas Santa Cecilia o A por Vino y cuentan con unos 40.000 clientes o compradores. Lo más llamativo, su capacidad de llegar individualmente a cada país con páginas específicas creadas para Reino Unido, Francia, Italia, Alemania, Portugal, Holanda, Bélgica, Austria, Suiza, Noruega y Dinamarca, lo que permite personalizar mucho la venta. La logística de envíos en este caso queda en manos de sus distintos afiliados.
Uno de los pioneros de la venta de vino online en España en funcionamiento desde marzo de 2005, Vinissimus se distingue por su amplia y variada oferta, con más de 4.000 referencias. Su fundador Toni Vicens empezó con una muy pequeña selección de vinos y un contestador automático en el que escuchar los pedidos cuando llegaba a casa por la noche. Su relativa larga trayectoria en el mercado le permite publicitar una cartera de 38.000 clientes. Cuenta con webs específicas para Reino Unido, Francia, Italia y Alemania, en este último país a través de www.hispavinus.de. Han repetido el mismo modelo de negocio con vinos italianos a partir del portal Italvinus con versiones de webs en italiano, castellano, inglés, francés y alemán.
Esta web nace a finales de 2009 en Barcelona y surge de la unión de una tienda de vinos del barrio de Gracia y una agencia de publicidad. Decántalo muestra especial preocupación por ofrecer información detallada de cada vino así como recomendaciones de un nutrido grupo de sumilleres. En la actualidad ofrecen unas 2.000 referencias de vinos españoles y cuentan con páginas webs específicas en inglés, francés, alemán y catalán.
El caso del club de vinos más grande de España es bastante atípico. Está presente en Reino Unido desde principios de los años noventa, después abordó Alemania y desde principios de los 2000 Holanda. Todo ello buscando la internacionalización de su modelo de venta directa a la que posteriormente añadió la presencia online. Como en España, ofrece a sus clientes la modalidad del club de vinos o la venta directa pero exigiendo una compra mínima de 6 botellas. El número de referencias a la venta es mucho menor y no supera la centena. Otra diferencia importante es que cuenta con almacenes físicos en los tres países a los que abastece todos los meses. Una rara avis dentro de la tendencia general del sector.
Lógicamente, casi todas las tiendas importantes de vinos en España (que casi siempre han combinado las funciones de tienda física con la de distribuidora y a veces también importadora) han acabado creando su versión online que, muy a menudo, vende fuera de España.
Así lo hace Vila Viniteca por ejemplo, que detalla en su web todos los países a los que tiene capacidad de servir pedidos (y que van más allá de la UE), en qué condiciones y si existen limitaciones o indicaciones específicas en cada caso. Todo el surtido está disponible en las tres versiones de la web en castellano, catalán e inglés. Vinos y Licores Grau, otro gran clásico de la venta de vino en Cataluña, cuenta con versiones adicionales en inglés, francés y catalán y sirve a Alemania, Austria, Bélgica, Dinamarca, Francia, Gran Bretaña, Grecia, Irlanda, Italia, Luxemburgo, Países Bajos, Portugal y Chipre.
Mientras, la madrileña Bodegas Santa Cecilia, con más algo más de 4.300 referencias en su catálogo, cuenta con versiones en castellano e inglés. Sirve en prácticamente todos los países de la UE aunque sus mercados más fuertes son Alemania, Francia, Reino Unido e Italia. Los productos que más venden son riojas y riberas. Insisten también en que (y este es uno de los grandes alicientes de la venta online) la compra media de vino por Internet es superior a la que se realiza en la tienda física.
A la lista de, digamos, operadores clásicos o consolidados en la venta online, hay que añadir un buen número de iniciativas surgidas en los últimos años y que incluyen nombres como A por Vino (con versiones en castellano, inglés y alemán; y que a su vez está integrada en la plataforma de Uvinum); El Sumiller, creado por el sumiller Juan Ayerbe con base en Galicia y que comunica además de en español en inglés, italiano, francés o alemán; Enterwine, que es el portal de venta online del Celler Can Dani en Barcelona y que cuenta con versiones en español, inglés y catalán; o Tomevinos, el nuevo grupo de tiendas y franquicias nacido en Madrid en 2009, muy centrado en vinos de relación calidad-precio (más de la mitad de su catálogo está por debajo de 10 €) y que comunica en inglés y alemán.
Probablemente los últimos en llegar sean Gourmet Hunters, la iniciativa de los sumilleres Lluís de Pablo y Claudio Comella (propietarios de la distribuidora Wein & Umami en Barcelona) junto al informático y experto en temas digitales Ivan Babitsch. Apuestan por ofrecer contenido, especialmente audiovisual a través de los videos que graba Claudio con elaboradores al más puro estilo Gary Vaynerchuck. También es llamativo que en torno al 40% de sus casi 4.000 referencias sean vinos extranjeros, con especial atención a Borgoña, Alemania (de Pablo tuvo una importadora en su día centrada en vinos de este país) y Champagne. Su selección, por otro lado, está especialmente orientada a wine geeks con muchas etiquetas alternativas y de pequeños productores. Venden en toda la UE, tienen versión inglesa y la alemana está en preparación.
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