Esta bodega de la familia Cantarero situada en la DO Uclés nació como firma granelista, pero dio el salto con éxito al embotellado en los años noventa apoyándose en la marca de calidad Quercus y en la extensa y espectacular finca Monte Carbonero (400 hectáreas de viñas plantadas entre encinas) que se beneficia de la altitud característica de la zona y de una interesante variación de suelos. Aunque en el pasado se ha embotellado bajo los indicativos de DO La Mancha y VT Castilla, en la actualidad la mayoría de los vinos se comercializan como DO Uclés. La bodega intenta transmitir un mensaje de especificidad desmarcándose de Mancha y presentándose como la zona más septentrional de Castilla La Mancha.
En los últimos años se ha producido un vuelco importante al encomendar la elaboración, gestión y comercialización de su vinos a Península Vinicultores. Una compañía centrada en la producción y comercialización de vinos, Península es un proyecto del empresario conquense y miembro de la familia propietaria de Fontana Jesús Cantarero y de los Masters of Wine Andreas Kubach y Sam Harrop, a los que posteriormente se sumó el empresario vasco Gorka Izagirre.
Con pequeños proyectos ya en marcha en otras regiones españolas, Fontana ha servido para aplicar toda una serie de nuevos conceptos apoyados en un manifiesto ético. Básicamente se resumen en trasladar al mercado la sostenibilidad en el campo y en la búsqueda de la autenticidad en cada uno de los niveles de precio; algo así como un camino ascendente desde lo meramente organoléptico a una mayor presencia de referencias culturales y de placer estético a medida que aumenta el precio y la complejidad y personalidad de los vinos.
La gama se ha reorganizado trazando un camino claro desde el viñedo (600 hectáreas de viñedo propiedad de la familia mas uvas de proveedores) a la botella, con nuevos vinos que reflejan el buen potencial aromático que se consigue en la finca Monte Carbonero, ahora renombrada Dominio de Fontana. Como resultado, la producción de la bodega ha pasado de 1,2 a cuatro millones de botellas.
Con unos tres millones de botellas de producción y precios entorno a los 4 €, Mesta es la nueva línea de vinos de entrada de gama, fundamentalmente monovarietales de perfil muy básico pero bien definido destinados a hostelería. El nombre hace referencia a la tradición del cuidado del ganado, una historia que se cuenta y está muy visible en el diseño de las etiquetas.
Siguen los vinos de finca Dominio de Fontana de los que se elaboran unas 600.000 botellas repartidas en varias etiquetas (alrededor de 7 €) entre las que abundan las mezclas de dos variedades y un estilo muy frutal como en el caso de los blancos Dominio de Fontana Sauvignon Blanc & Verdejo, y Chardonnay & Viura, y los tintos Dominio de Fontana Garnacha & Syrah, Tempranillo & Cabernet o Dominio de Fontana Roble Tempranillo & Syrah, el vino que más conexión guarda con el estilo del pasado por su gran implantación en el mercado local. La gama top incluye los vinos de pago Quercus (5.000 botellas, unos 22 € en España) y Quinta de Quercus (unos 12 €) que se comercializan con la indicación single vineyard en la etiqueta.
En la práctica funcionan como tres bodegas diferentes también en cuanto a instalaciones con distintos protocolos de vendimia, elaboración, tamaño de depósitos y criterios de selección. Existe también una línea experimental bautizada como Ovejas, cuyo producto más consolidado es el moscatel Oveja Blanca (unos 8 €) junto al monovarietal de graciano Oveja Negra.
El 75% de la producción de Fontana se destina a la exportación.