Integrada en el grupo Familia Martínez Bujanda, Finca Valpiedra ocupa una de las fincas más espectaculares de Rioja, estratégicamente situada en un meandro del río Ebro entre las localidades de Fuenmayor y Cenicero. Con vocación clara de elaborar solo con uvas de la finca, es la única propiedad de esta denominación junto con Valenciso integrada en la asociación Grandes Pagos de España.
Las 80 hectáreas de viñedo se reparten en tres terrazas que bajan hasta el mismo río. Salvo alguna parcela originaria, la mayor parte de las plantaciones se realizaron en vaso a mediados de los 70. La tempranillo ocupa la mayor parte de la superficie pero hay también un par de hectáreas de graciano y tres de maturana tinta plantada en 2005 que se han destinado a reemplazar a la cabernet sauvignon en el ensamblaje del Finca Valpiedra. Y la cabernet de la finca se ha reinjertado con garnachas del Najerilla
Finca Valpiedra (20 €, unas 100.000 botellas) es el tinto top de la casa. A él se destinan los viñedos más viejos plantados en suelos con mayor proporción de arcilla que dan vinos más longevos y estructurados. La fermentación se realiza en acero inoxidable y la crianza en roble francés.
Cantos de Valpiedra (9 €, 150.000 botellas) es un monovarietal de tempranillo de muy buena relación calidad-precio que procede de los terrenos más pedregosos, con ese característico canto rodado que da nombre a la finca. Se busca un estilo más fluido y ligero con 12 meses en barricas, un 30% de roble americano. Dependiendo de los mercados puede encontrarse como crianza o con contraetiqueta genérica.
Para el enólogo Lauren Rosillo, el gran factor cualitativo de Valpiedra es la consistencia entre añadas. Gracias al suelo pedregoso pueden vendimiar 15 días antes que sus vecinos de Cenicero y librarse de las temidas lluvias en vendimia, como ocurrió por ejemplo en 2014. En 2017 además se libraron de las heladas.
El nuevo Petra de Valpiedra (37 €, unas 5.000 botellas) es un monovarietal de garnacha que se vinifica en hormigón con levadura natural, hace maloláctica en roble francés nuevo y se cría 10-12 mese en barricas viejas.
Se está trabajando también con un viñedo centenario de viura para elaborar un blanco de crianza relativamente larga en barrica y botella y que incorporará algo de maturana blanca, garnacha blanca y malvasía.
La propuesta básica de enoturismo incluye visita a viña (las vistas al Ebro son imprescindibles) y bodega con cata, pero también existe la posibilidad de añadir un picnic a orillas del Ebro o un paseo en segway por las viñas. La visita “Grandes Pagos de España”, por último, profundiza en la singularidad del terruño y del concepto de vino de finca.
Liderado por los hermanos Carlos y Pilar Martínez Bujanda, el grupo incluye una segunda bodega en Rioja, Viña Bujanda, así como sendos proyectos en La Mancha (Finca Antigua) y Rueda (Finca Montepedroso), además de la bodega de elaboración de vinos de mesa y de la tierra Cosecheros y Criadores.
Los vinos del grupo pueden adquirirse en su tienda on-line.
