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BODEGAS

ESTA BODEGA YA NO ESTÁ OPERATIVA

Este es el bastante desconocido pero apasionante proyecto de dos enólogos muy respetados en sus respectivas regiones: el aragonés Jorge Navascués, director técnico de Pago de Aylés y asesor de varias bodegas en Aragón; y Carlos San Pedro, fundador de Bodegas y Viñedos Pujanza en Laguardia (Rioja). A principios de los 2000 se juntaron a mitad de camino entre sus respectivas zonas para trabajar con viejas garnachas del valle del río Aranda, en el municipio de Jarque del Moncayo (Zaragoza). La comarca, que se queda fuera de denominación de origen, ha perdido muchos de sus viñedos históricos y gran cantidad de superficie de viñedo. Los vinos se comercializan con el indicativo VT Valdejalón.

Trabajan con unas nueve hectáreas de viñedo en el que prima la exposición norte. Las cepas, de unos 50-60 años y en vaso, se cultivan a gran altitud, entre 800 y 900 metros, sobre suelos de pizarra negra descompuesta cuya personalidad se traslada claramente a los vinos. Los rendimientos rara vez superan el kilo y medio por cepa. La fermentación se realiza en acero inoxidable previo despalillado y para la crianza se utilizan barricas de roble francés y americano de 225 litros.

Las producciones son muy reducidas: 5.000-6.000 botellas para Mancuso (unos 44 € en España), que realiza la maloláctica en barrica y envejece durante 14 meses en roble francés Allier; y unas 15.000 de Moncaíno de Mancuso (14 €), con una crianza más corta de 7 meses en roble americano y francés. Mancuso es el nombre de una moneda de oro aragonesa que se acuñó por vez primera durante el reinado de Sancho Ramírez, mientras que “moncaíno” hace referencia al Moncayo, la gran montaña del sistema Ibérico en cuyo entorno se cultivan algunas de las garnachas con más personalidad de la Península.

Estamos, especialmente en el caso de Mancuso, ante vinos raciales y de cierta contundencia, que combinan sensaciones cálidas de la pizarra con los frescos matices balsámicos que se consiguen gracias a la altitud y a las exposiciones más frescas. Vinos que apasionarán a quienes buscan el terruño en la copa.

VINOS CATADOS DE ESTA BODEGA

Mancuso 2006 Tinto

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