Con una filosofía de elaborar vinos frescos a partir de viñas de montaña, Cara Nord nace en 2012 fruto de la colaboración de Tomas Cusiné (Castell del Remei, Cérvoles y Tomás Cusiné) y Xavier Cepero. Ambos conocían bien el potencial vitícola de los viñedos de altitud de las Montañas de Prades, un conjunto de sierras enmarcadas en la Cordillera Prelitoral Catalana y en torno a las cuales confluyen las denominaciones de origen Costers del Segre en la subzona de Les Garrigues (Lleida), el área meridional de Conca de Barberà y, más al sur, las denominaciones de Montsant y Priorat.
En la vertiente de Costers del Segre, también con viñas de montaña y en altitud, es donde Cusiné opera con Cérvoles y con la bodega que lleva su nombre. Sin embargo, el predominio de la orientación norte en Conca de Barberà les resultaba especialmente atractivo para elaborar vinos de corte fresco y expresivo por el ciclo de maduración más largo, pero también por la alta intensidad de color, aromática y gustativa fruto de la mayor incidencia de rayos ultravioleta que acrecientan el grosor de la piel de la uva.
Se abastecen de unas 24 hectáreas de viñedo, 9 de ellas propias, que llegan hasta los 800 metros de altitud. Son viñas de secano que alivian la sequía estival con la marinada, el viento que viene del mar desde el mediodía. Se cultivan en suelos de transición entre la pizarra de la ladera de las montañas y los suelos calcáreos con porcentajes variables de arcilla y guijarros de los pequeños valles que caracterizan la zona. Las viñas más viejas, de unos 80 años, son de macabeo. El resto es trepat o plantaciones en espaldera con 15 años de edad media que incluyen garnacha, syrah, garrut (monastrell), chardonnay y albariño.
La gama de vinos arranca con los básicos Cara Nord en versión blanca y tinta que a menudo se encuentran por debajo de los 10 € en España. El primero es un ensamblaje de macabeo, chardonnay y trepat vinificado en blanco con tres meses de lías en acero inoxidable. El segundo, muy expresivo y especiado, mezcla garnacha, syrah y garrut (monastrell) y se cría unos seis meses en roble francés.
El resto son vinos varietales entre los que la uva local trepat ocupa un lugar destacado, ya que se elabora en versión tinta (12,5 €) con 10 meses de crianza en acero inoxidable, y rosada (10,5 €). Hay también un Cara Nord Garrut (monastrell, 15 €) que se cría un 50% en ánfora y el resto en barricas de roble francés de 500 litros.