SWL.

SWL.

Gil Family Estates

Paraje de la Aragona. Ctra. de Fuente Álamo, s/n. 30520 Jumilla (Murcia)

gilfamily.es
Gil Family Estates

En 2016 la familia Gil celebró el centenario de la creación de su proyecto vitícola por parte del bisabuelo Juan Gil Jiménez, que dejó atrás su profesión de picapedrero para empezar a elaborar vino en Jumilla.

Tras el salto al embotellado en una zona eminentemente granelista hasta no hace tanto, la cuarta generación apostó por llevar la calidad de los tintos locales a lo más alto con el proyecto de Bodegas El Nido, cuyas famosos y opulentos vinos Clío (70% monastrell, 30% cabernet sauvignon, unos 42 € en España) y El Nido (70% cabernet sauvignon, 30% monastrell, unos 145 €) se elaboran en colaboración con el conocido enólogo australiano Chris Ringland.

También es muy loable que desde una denominación aparentemente humilde se haya creado un gran grupo del vino español que en la actualidad está presente en diez regiones vitivinícolas: Jumilla (Juan Gil y Bodegas El Nido), Montsant (Can Blau), Priorat (Llicorella Vins), Calatayud (Ateca), Campo de Borja (Morca), Almansa (Atalaya), Castilla y León (Tridente y Shaya, esta última en la DO Rueda) y Rías Baixas (Lagar de Condesa). La última en la que se han asentado es Rioja donde han edificado una bodega propia (Rosario Vera) tras hacerse con distintas viñas en Rioja y Rioja Alavesa.

Son en total más de 1.400 hectáreas de viñedos en propiedad y más de 8 millones de botellas, de las que un 75% se exportan a más de 40 países. La sociedad que gestiona el grupo está integrada por los nueve hermanos que forman la cuarta generación y liderada por dos de ellos: Miguel y Ángel Gil.

Los pilares de su estrategia son, por un lado, ofrecer calidad al mejor precio posible y, por otro, la creación de economías de escala para ser competitivos. Entre sus planes está desarrollar un proyecto de enoturismo en Jumilla que pueda convertirse en modelo para el resto de bodegas del grupo.

Las gamas de las distintas bodegas se articulan en torno a un vino de entrada de precio muy competitivo, una segunda propuesta que suele situarse entre los de mejor relación calidad-precio de la zona y una etiqueta superior.

Vinos de toda España

Jumilla ofrece el abanico más amplio, con un blanco seco de moscatel (7,5 €), el tinto Honoro Vera de entrada de gama (6,5 €) y los archiconocidos Juan Gil con distintos tiempos de crianza Etiqueta Amarilla  (cuatro meses, 7,5 €), Etiqueta Plateada (12 meses, 13,5 € ) y Etiqueta Azul (18 meses, 27 €). La última novedad en la cosecha 2022 es Juan Gil Etiqueta Azul Cuvée A (37 €), un monastrell criado a partes iguales en ánfora y roble. Todos los precios son para España. La gama de Bodegas El Nido se ha ampliado recientemente con el syrah Corteo (unos 85 €).

En Almansa se trabaja en torno a la garnacha tintorera. Los vinos se acompañan de monastrell en las propuestas más asequibles: un 30% en Laya (6,5 €) y 15% en La Atalaya del Camino (13 €), mientras que la propuesta top es el monovarietal Alaya Tierra (27 €).

Dentro de la cuenca mediterránea pero más al norte, en Cataluña, el proyecto de Montsant incluye porcentajes variables de garnacha, cariñena y syrah plantados en suelos de pizarra, arcilla y caliza respectivamente en sus tres propuestas en la zona: Blau (9 €), Can Blau (13 €) y Mas de Can Blau (37 €). La nueva apuesta en Priorat, Llicorella Vins, incluye el tinto Minairó (19 €), elaborado con garnacha y cariñena, y la etiqueta de gama alta Clar del Bosc (40 €) que añade las variedades internacionales cabernet sauvignon y syrah.

En Calatayud, la primera región de Aragón en la que entró la familia, se elaboran tres monovarietales de garnacha: Honoro Vera (5,5 €), Atteca (13 €) y Atteca Armas (37 €) al que se destinan los viñedos más viejos. En Campo de Borja, uno de los proyectos más recientes del grupo el objetivo es más ambicioso con sendas garnachas envejecidas durante 15 y 20 meses que se pueden encontrar en España a 21 € (Godina) y 37 € (Morca) respectivamente.

En Castilla y León, la bodega de Rueda trabaja con viñedos de la zona de Segovia donde se concentra un alto porcentaje de viñedo viejo y los suelos son característicamente arenosos. La gama incluye el verdejo de entrada Arindo (8 €), Shaya (11 €) y Shaya Habis (26 €), este último fermentado y criado en barrica y procedente de viñedos muy viejos cultivados en vaso.

Más al norte, en Zamora, existe una segunda bodega que se surte de uvas del entorno para sacar al mercado distintos monovarietales bajo la designación VT Castilla y León. El entrada de gama Entresuelos (9 €) es un tempranillo de suelos arenosos, mientras que para Tridente (13 €) se buscan viñas más viejas de la misma variedad asentadas en suelos cascajosos. Rejón (47 €) es un parcelario de su mejor viña, de 130 años, situada en el municipio de El Pego. Bajo la marca Tridente también se elabora un blanco (13 €) de cepas centenarias de la variedad local malvasía (dona blanca) y un tinto de prieto picudo (26 €), también de viñedo viejo, pero en este caso de una viña del municipio de Pajares de los Oteros en León.  

El proyecto atlántico del grupo está ubicado en Rías Baixas donde se elabora el albariño Lagar da Condesa (18 €) con uvas del valle del Salnés.

La última zona en la que ha entrado el grupo es Rioja. El nombre del proyecto, Rosario Vera, es un homenaje a la matriarca de la familia. Las uvas, procedentes de pequeñas parcelas de entre 15 a 60 años, se vinifican en las instalaciones que se han construido en la localidad alavesa de Laguardia. El tinto central del proyecto (13 €) lleva el nombre de la bodega, aunque también hay un un tempranillo con fermentación parcial por el sistema de maceración de carbónica bautizado como Rosario Vera Amona (abuela en euskera, 9 €).  El tinto más alto de gama es Biloba de Vera Parcelas Seleccionadas (21 €). Todos ellos llevan el sello de Rioja Alavesa en la etiqueta. 

El grupo se ha hecho un nombre especialmente por sus tintos golosos y de buenas maduraciones con texturas amables y muy agradables de beber. En las gamas altas se ha potenciado más la opulencia siguiendo el estilo marcado por Chris Ringland en El Nido.