La cooperativa de San Martín de Unx data de 1914, cuando fue constituida por 192 viticultores de este municipio que puede considerarse la puerta de entrada a la subzona de Baja Montaña. Las amplias instalaciones históricas todavía pueden verse en el casco urbano del municipio, pero desde el año 2000 se elabora a las afueras de la localidad en modernos depósitos de acero inoxidable con capacidad para cinco millones de litros. Existe también una zona específica para envases bag in box.
Los socios controlan en torno a 600 hectáreas de viñedo. Aproximadamente un 35% son parcelas tradicionales en vaso asentadas en las características laderas y terrazas de las sierras que rodean el municipio.
La apuesta actual de la empresa gira en torno a la garnacha, la variedad autóctona de la zona. La línea básica en torno a esta variedad se comercializa bajo la marca Señorío de Unx que incluye un blanco de garnacha blanca y un tinto, así como un crianza (6 €) y un reserva (7,50 €) que llevan algo de tempranillo en su ensamblaje.
Más interesante resulta el nuevo La Matacalva (6,5 €) que toma su nombre de uno de los parajes del municipio e intenta dar el mayor protagonismo a la fruta utilizando barricas usadas en la crianza. Se presenta con una imagen más moderna y en botella borgoña, lo mismo que los top Alma de Unx en versiones blanca (garnacha blanca criada 8 meses en barrica, 12,5 €) y tinta (12,5 €), para la que seleccionan los viñedos más viejos que se crían entre 8 y 10 meses en roble navarro. El resultado es un tinto de gran relación calidad-precio, con complejidad de hierbas y monte bajo, interesante potencia, pero acompañada de una textura amable y viva acidez.
La bodega se puede visitar previa petición de cita.