Con una producción de unos 45 millones de botellas, Codorníu es el segundo elaborador de cava más importante de España después de Freixenet. Hasta que el grupo Carlyle adquiriera una participación mayoritaria en 2018 era la empresa familiar más antigua del país, con actividad vinícola documentada desde mediados del siglo XVI. El conjunto de edificios históricos de estilo modernista, obra del arquitecto Josep Puig i Cadafalch, fue reconocido en 1976 como Monumento Histórico Artístico Nacional y recibe unas 100.000 visitas anuales.
También posee una de las mayores cavas del mundo (25 kilómetros repartidos en cinco niveles), en las que se ubica el Celler Jaume, una microbodega de lujo, centro de experimentación y corazón actual de la actividad de I+D de la firma donde desde 2013 operan el enólogo Bruno Colomer y su equipo.
Aquí se elabora la nueva gama alta Ars Collecta, un reflejo de las tres áreas vitícolas de las que la compañía se surte para sus espumosos de mayor calidad: la finca de Raimat en el Segrià, la Serralada de Prades (Conca de Barberà), justo en la vertiente opuesta del Montsant con suelos de pizarra y el Penedès, con mayor influencia mediterránea. De estas tres fincas surgen tres cavas monovarietales con categoría de gran reserva, 100 meses de crianza y que han sido reconocidos como cavas de calificados: Finca La Fideuera (xarel.lo del Alt Penedès), Finca La Pleta (chardonnay, Costers del Segre) y Finca El Tros Nou (pinot noir, Conca de Barberà).
Existe un cuarto cava con las mismas características, el top 456, que nace del ensamblaje de las tres fincas en una proporción de 50% chardonnay, 40% pinot noir y 10% xarel.lo Este último espumoso, que hace alusión al número de vendimias realizadas por la familia, es un vino de extrema juventud y marcada sutileza con alto potencial de envejecimiento. Se espera que las producciones, muy reducidas en la primera cosecha 2007 (1.000 botellas del 456 y 300 en los cavas de finca) se amplíen en el futuro. Los precios van en línea con la ambición del proyecto: 175 € el 456 y 80 € el resto.
El antiguo top de la bodega, Jaume de Codorníu (30 €), que se elabora a partir de otras fincas de los tres territorios antes descritos forma parte también de la colección Ars Collecta, a la que se han añadido tres nuevos cavas que se presentan en botellas talladas de inspiración art nouveau: un blanc de blancs, un blanc de noirs y un rosé con precios entre 17 y 22 €.
Bajo la marca Codorníu, en la categoría de reservas destacan el Non Plus Ultra (10 €), el Gran Plus Ultra Chardonnay (13 €) y el rosado Gran Plus Ultra Pinot Noir (14 €).
La gama de “Annas”, por otro lado ha crecido considerablemente en los últimos tiempos. En el mercado desde 1984, el nombre rinde tributo a la heredera y última persona en la familia en llevar el apellido Codorníu. Anna Brut (12 meses, 9 €) es el producto básico, que también se elabora como brut nature. Posteriormente llegaron Anna Brut Rosé (10 €, 70% pinot noir y 30% de chardonnay); Anna Blanc de Noirs (10 €) elaborado con pinot noir, y Anna Blanc de Blancs (15 meses, 10 €), pensado fundamentalmente para restauración, con las mismas variedades y en la misma proporción que el Anna Brut. Y los más comerciales Anna Ice (unos 9 €) en versión blanca y rosada.
Codorníu exporta un 45% de su producción a más de 90 países en todo el mundo, siendo sus principales mercados Estados Unidos, Reino Unido y Bélgica. Como grupo, abarca una decena de bodegas, una de ellas en Argentina (Séptima, en Mendoza) y otra en EE.UU. (Artesa en Napa Valley, California). En España está presente en Rioja (Bodegas Bilbaínas), Ribera del Duero (Legaris), Priorat ( Scala Dei), Conca de Barberà ( Abadía Poblet), Penedés (Bach), Costers del Segre (Raimat) o el Valle del Cinca (Nuviana).
Los vinos pueden adquirirse en la tienda online del grupo.